No sé por qué me amabas... no sé por qué te amé. Seguramente nos amamos porque nos amábamos. Jajaja.
Así que nos juntamos a hacer lo que mejor hacíamos: tomar y fumar como enfermos de la cabeza que somos.
Y ahí estaba la lesbiana en la otra mesa, joteándome poco.
Ahí está la foto: arruinada por su mano lela.
Ay Adrianito... espero que la próxima vez que tomemos no me quemes la panty, y no hayan lelas arruinando nuestras fotos... por lo menos no otra que no sea mi hermana jajajajaja.
JAJAJAJAJAJAJ, exploté con eso de que no sea tu hermana JAJAJAJ.
ResponderEliminarpero igual, amé que haya terminado con tantas tragedias ese día porque lo hizo re bacán.
hay que vernos de nuevo cuando vuelvas :*