Mi mundo está destruido... pero se destruyó hace poco. Explotó en mil pedacitos.
Yo tenía un mundo en donde todo era sonrisas. En donde las fotografías se daban de manera fácil, y todos querían estar en ellas.
Mi mundo estalló hace algún tiempo, y ahora está en reconstrucción... está en reconstrucción hace más de 7 meses.
Todo finalmente termina destruyéndose, aunque sea por extrañas razones.
A la gente le tiene que pasar ese tipo de cosas para valorar más cada momento de tranquilidad, placer, cariño... qué sé yo.
Nada es para siempre, y la gente lo vive repitiendo.
Nada es para siempre... es momento de que lo vayamos entendiendo.
¿Mi mundo? Reconstruyéndose. Rodeado de banderas de colores, de globos, corazones, libros, letras, un tortugo que me teme, un padre ausente, una hermana que me odia más momentos de los que me ama, una amiga loca loca que me recoge con espátula del suelo cada vez que me aplastan, una madre muy ocupada, revistas de moda, y un closet al que ya le di tregua.
¿mi mundo? mi mundo es este... estoy viviendo en la lucha por reconocer una vez que lo que necesito no es lo que estoy buscando, y que en realidad debería buscar lo que necesito, lo que realmente quiero, pero me es complicado librarme así y exponerme de esa forma.
Mi mundo, como el de ustedes, es frágil, aunque un poco más solitario. Soy como un árbol en medio de un pastizal, sin hojas, esperando la primavera.
Ese es mi mundo... bastante parecido al árbol de Tim Burton.