El otro día me encontré con una amiga en el supermercado y me hizo la pregunta que ya se me hace bastante común por estos días: ¿Qué tienes que hacer? Podríamos juntarnos uno de estos días... Entonces yo respondí: "¡anda a casa el fin de semana!"...
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"Es navidad", me respondió. No me había dado cuenta que el año ya casi termina. Hasta el día domingo, aún hablaba de Año Nuevo como si fuese una fiesta por la que tenía que esperar un mes. Idiota que soy.
Es que no tengo árbol de navidad, ni siquiera una esfera en la casa. Ni una luz, ni una guirnalda, ni siquiera un regalito. Nada que me recuerde que el año ya termina y que se acerca navidad. Entonces, simplemente no lo recordé.
Ahora para darle un poco de navidad a mi vida, estoy sentada en el balcón de mi departamento y me acabo de fijar, por ejemplo, que hasta el conserje tiene un árbol de navidad con luces frenéticas.
Así que aún cuando no tengo árbol, igual tengo balcones iluminados, gente hablando afuera, niños que me despiertan de las siestas con gritos, y todas esas cosas que te recuerdan que ya es VACACIONES y que el mundo quiere fiestas de fin de año.
Yo me pregunto ¿qué le pediste al viejito pascuero este año? Yo le había pedido una tortuga, pero me dijo que las de tierras son ilegales, así que cagué... una de agua me da mucha flojera :(
Ale.-
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