jueves, 21 de julio de 2011

El maravilloso arte de vomitar


Soy vomitona. Mis mejores amigos lo saben, y mi madre también, y me comprende. A veces es ella misma quien me facilita las bolsas de mareo, porque... mi madre también es una vomitona.

A veces ni siquiera hace falta que esté muy ebria para irme a abrazar el wáter por unos cuantos minutos.

Otras veces lo hago porque estoy muy mareada, y las ganas de orinar tardan en llegar. Es como desviar la vía de evacuación por "motivos de fuerza mayor".

Lo que más agradecen mis amigas en este minuto, es que haya decidido cortarme el cabello, porque así sólo tienen que conversarme mientras me soban la espalda... se ahorran lo del pelo vomitado... tengo un poco más de glamour a la hora del vómito que otras féminas.

No me molesta vomitar, sobre todo cuando es copete, pero hay gente a la que le carga. Yo lo recomiendo absolutamente. Siempre con una caña "de aquellas", ayuda expulsar todo... al principio te queda palpitando la cabeza, por la presión que se ejerce al momento de... pero después todo es alivio y color de rosa.

Qué hacer si no te quieres meter los dedos a lo bulímico??? bueno, métete la parte de atrás de su cepillo de dientes ;)

Que vomiten lindo.

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